Te despienso.

A veces te despienso 
desgloso las infinitas capas 
que tiene tu sonrisa 
el gesto amable tras el beso
la mirada febril con la que ardo.
Y no deseo nada más
que ser alimento y regocijo
para los mordiscos enamorados
de los gusanos que me esperan.
Quiero el esqueleto al ras del piso
para que siempre que quieras
me vuelvas a acariciar la mano
deslices tus dedos por donde
alguna vez hubo labios
acaricies los párpados invisibles
de mil miradas vacías.
Mi costillar esperará el encuentro
con tu pecho y sus latidos
que serán ecos temblando en la tierra.
Y que podamos dormir juntos
como antes.
A veces te despienso
desgloso las infinitas capas
que tiene tu sonrisa
casi todas me dan vida
en algunas muero
pero todas las disfruto.

Tendría que enseñarte silencios

Tendría que enseñarte silencios
de esos que cubren la boca
para que veas el amor, el dolor
y todo,
lo que una palabra puede causar.
Sin embargo ni la noche más triste
pronuncia alguna palabra.
Ni aquel animal herido de bala
ahora sí extinto de la faz de la tierra.
Ni el viejo árbol de enorme tronco
con más inviernos que la vida
se digna a decir alguna palabra
antes de caer abatido
por la codicia del hombre.
Entonces poco puedo pretender
que aprendas del silencio.
Tan majestuoso y difícil silencio
ahora entiendo por que hablamos tanto.

Mis amores

Mis amores 
son coquetos rencores
que se pasean por las avenidas
son puñaladas frías 
que al final no sangran
son besos ardientes
que algún día me dejaran calcinado.
Mis amores 
son recuerdos que me han olvidado
me he vuelto viejo y triste
y mis amores aun juveniles
rozan mis cicatrices con sus labios
tan tiernos y desafiantes, mis amores.

Libertades

Nadie sabe que estoy vivo

podría no avisar si estoy muerto

son libertades

que me compre de a poco

con mi propio tiempo

sin pedirle a nadie

siquiera un bostezo.

Eso y nada mas.

Todo lo que das
es un recuerdo
eso y nada más.
El viento susurra al pasar
besos de amantes que vendrán
a ocupar un día tu lugar
a borrarte de mi boca y corazón.
Sin la tristeza que ahora siento te diré
soy un perro sin luna a la que aullar.
Tan cruel es la verdad cuando amenaza
con que el olvido vendrá a robar
todo lo que es mío y de nadie más.
Aquello que parece un vendaval
tan solo es tiempo ya verás.
Eso y nada más
es un recuerdo
todo lo que das.

De aquí

De aquí en adelante

se plantan sueños a domicilio

se reparan esperanzas

y se regalan latidos

que la vida es eso

ir regalando

aquello que más queremos.

Te veo.

Te veo

un día de estos

por aquella vereda

que desgastan las ausencias.

Quizás te ignore

como a otro de tantos

fantasmas que rondan

los silencios de esta casa.

O tal vez

me demore un segundo

dudando si es verdad

lo que ven mis ojos

la vida que te has llevado.

Te veo

cuando te de

el mal tiempo buena cara

y otro te robe una sonrisa

como las que te robé antes.