Adórame que soy un puto dios
que te dio vida solo para que aprendas
lo mucho que puede arder el infierno
y lo fácil que se transforma todo en ceniza.
Son tan pocos los que tienen el placer
de nacer donde mueren.
Casi nadie logra jamás tocarse el alma
y sentir lo que solo siento yo.
Adórame que soy tu rey
en un trono con forma de cruz
y una corona que lleva una espina
por cada día que perdí creándote.
Lámeme como al maldito amo
que te enseño a contar los eslabones
de esa cadena que te hace ser
tan solo un perro que ladra.
Desata la ira que te regale
y muéstrasela a esos miserables
cualquier día es hermoso para herir
cualquier día es hermoso para estar muerto.