martes, 29 de noviembre de 2011








Adórame que soy un puto dios

que te dio vida solo para que aprendas

lo mucho que puede arder el infierno

y lo fácil que se transforma todo en ceniza.

Son tan pocos los que tienen el placer

de nacer donde mueren.

Casi nadie logra jamás tocarse el alma

y sentir lo que solo siento yo.


Adórame que soy tu rey

en un trono con forma de cruz

y una corona que lleva una espina

por cada día que perdí creándote.

Lámeme como al maldito amo

que te enseño a contar los eslabones

de esa cadena que te hace ser

tan solo un perro que ladra.


Desata la ira que te regale

y muéstrasela a esos miserables

cualquier día es hermoso para herir

cualquier día es hermoso para estar muerto.



No hay comentarios:

Nunca hicimos nada bien.

  No va a quedar silencio detrás no habrán dudas que cuestionar  ni se necesitará explicar con palabras todo lo que queda lo que nadie esper...